Semarnat reconoce devastación ecológica por construcción del Tren Maya que AMLO negó

El hecho de que la bióloga Alicia Bárcenas, junto con autoridades de la Subsecretaría de Biodiversidad y Restauración Ambiental, de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) realizaran recorridos por la zona devastada por la construcción del Tren Maya -que tanto denunciaron organizaciones ambientalistas durante los cinco años que duró el proyecto- para implementar acciones de restauración ecológica, marca un distanciamiento con la política medioambiental del expresidente Andrés Manuel López Obrador en el sexenio pasado

Loading

image


Sí causó daño al ecosistema forestal de la selva de la Península de Yucatán la construcción del megaproyecto Tren Maya, reconoció la actual titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alicia Bárcena Ibarra, al mencionar las acciones de restauración que deberán aplicarse en el sistema de cenotes y cavernas, así como en la reforestación del bosque y manglar donde se tiraron más de 10 millones de árboles, además de la implementación de labores para el cuidado de la fauna endémica y el agua.


El hecho de que la bióloga Alicia Bárcena, junto con autoridades de la Subsecretaría de Biodiversidad y Restauración Ambiental, de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) realizaran recorridos por la zona devastada por la construcción del Tren Maya -que tanto denunciaron organizaciones ambientalistas durante los cinco años que duró el proyecto- para implementar acciones de restauración ecológica, marca un distanciamiento con la política medioambiental del expresidente Andrés Manuel López Obrador en el sexenio pasado.

Ambientalistas, vilipendiados por AMLO, tenían razón de que fue un ecocidio

Como lo publicamos en este espacio, el pasado 29 de febrero del 2024, siete organizaciones ambientalistas del colectivo de #Sélvame del Tren protestaron pacíficamente en contra de las inconclusas e ilegales obras de la Estación Playa del Carmen del Tren Maya, argumentando que estaban matando literalmente la selva y los mantos acuíferos, teniendo como marco la visita del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador a Quintana Roo.

En su cuenta de Facebook criticaron que AMLO ni siquiera se bajó del helicóptero en el que se trasladó a la zona para “ser testigo del desastre ambiental en el Tramo 5 del mal llamado @Tren Maya”.

Allí se han “tirado más de 10 millones de árboles y se han triturado quedando solo el aserrín”, explicó el biólogo Roberto Rojo en un video del pasado 20 de febrero en donde aparecía afuera de Palacio Nacional, en la Ciudad de México.

Llevó al presidente de la República los restos de un gigantesco árbol, junto con una roca extraída de la carverna del Acuífero Maya, para presentarlo como evidencia del ecocidio en esa zona de Quintana Roo como consecuencia de la construcción de un tren de pasajeros, el Tren Maya, sobre la selva del sureste mexicano.

En otro video, los ambientalistas “muestran la tercera prueba de contaminación y vulneración del acuífero y cavernas por perforación y derrame (voluntario) en el Tramo 5 sur del mal llamado Tren Maya”.

“Ya está demostrado que la consigna es rellenar más de 15 mil pilas de acero y concreto sobre el gran Acuífero Maya”, señalaron.

El biólogo Roberto Rojo mostraba en un video el cemento derramado en cavernas y cenotes donde metieron los pilotes del Tren Maya

Ese mismo día, el expresidente López Obrador aseguró que se cuidaba a la naturaleza en la construcción del Tren Maya en Quintana Roo y nuevamente esparció la semilla de odio contra los ambientalistas que defiendían el agua, la flora y fauna de los cenotes de la selva maya.

Pese a un amparo por cambio de uso de suelo, AMLO inauguró el último tramo del Tren Maya

Lo anterior en el marco de la inauguración del Tramo 5 Norte del Tren Maya, que conecta Cancún con Playa del Carmen, entre protestas de organizaciones ambientalistas y la -no acatada- orden de suspensión definitiva de las obras por parte de un juez de Distrito del Juzgado Primero de Yucatán, atendiendo la denuncia de falta de cambio de uso de suelo por la que el colectivo Sélvame del Tren tramitó el amparo 2878/2022.

La resolución del pasado 16 de febrero de 2024 indicaba que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ejecutó el desmonte de selva para la vía del tren sin existir una autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales, lo que es:

“Contrario a las disposiciones de la Constitución federal relativas a los derechos humanos a un medio ambiente sano, al agua, garantías de seguridad y legalidad jurídica”.

Antes de la inauguración, en la conferencia mañanera, López Obrador aseguró que los videos en los que se demostraba un daño al medio ambiente eran montajes y que había “seudoambientalistas” corruptos y que tenía pruebas de que han destruido Quintana Roo. Confirmó que estos videos tenían fines políticos detrás.

Debe pagar la restauración ecológica quien construyó el Tren Maya


Dentro de las acciones para la restauración de cavernas y cenotes de Quintana Roo, se trabaja en un posible decreto de declararlos zona natural protegida, informó la Semarnat en conferencia de prensa.

La subsecretaria de Biodiversidad y Restauración Ambiental, Marina Robles García, dijo que se analiza el procedimiento para decretar el sistema de cavernas como reserva de la biosfera, al señalar que el que debe pagar esa restauración es “quien hizo la obra”.

La funcionaria no lo mencionó, pero el proyecto ferroviario insignia de la Cuarta Transformación contó con la participación de empresas constructoras nacionales y extranjeras, así como de técnicos y proveedores:

La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Bombardier Transportation México, Gami Ingeniería e Instalaciones, Construcciones Urales Procesos Industriales.

Alstom: Fabricó los trenes X’Trapolis en Ciudad Sahagún, Hidalgo; Construcciones Urales: Construyó el Tramo 3 (Calkiní-Izamal) en la Península de Yucatán; ICA Constructora: Participó en los tramos 4 y 5 sur (subtramo C); Operadora CICSA: Subsidiaria de Grupo Carso, con un contrato global por 27 mil 874 millones de pesos; Consorcio Azvindi Ferroviario: Conformado por Grupo Azvi y Grupo Indi; Consorcio Mota-Engil México y CCCC: Participan en el tramo 1.

Jaguar, tapir y venado, ya no serán fauna “nociva”

Mejorar los pasos de fauna junto con la eliminación de malla en los alrededores del tren es otra de las acciones de restauración ecológica.

“Ha sido una de las grandes preocupaciones de la comunidad, de especialistas en la zona y también de las comunidades que habitan ahí y eso tiene que ver, no nada más con el paso de fauna, sino también con la eliminación de zonas que quedaron con malla, que no es necesario que tengan malla y que realmente impiden el flujo de fauna”, explicó Robles García.

Cabe resaltar que a principios de diciembre del año pasado, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Tren Maya, S.A. de C.V. contrataron el servicio de manejo de fauna nociva para las operaciones ferroviarias del Tren Maya con el objetivo de ahuyentarlas, capturarlas, removerlas de las cercanías del tren e incluso sacrificarlas.

Por lo que clasificaron a especies endémicas en peligro de extinción como jaguar, tapir o venado riesgosas para las operaciones ferroviarias.

Sergio Graf Montero, director general de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), explicó que el trabajo de reforestación es mediante la compensación establecida por los daños relacionados con cualquier infraestructura, como en este caso el Tren Maya.

Se compensarán los 10 millones de árboles tirados con especies que sean útiles para los habitantes de la Península de Yucatán como los productores de chicle:

“Sacaremos acciones para la restauración de manglares degradados en toda la Península de Yucatán. Apoyar a la restauración productiva con estos grupos de productores, chicleros que trabajan la selva y que son enriquecimiento de acahuales para producir especies de utilidad”, explicó Graf Montero.

“Lo que estamos buscando también es impulsar una restauración que le genere beneficios a la población propietaria de los terrenos que queremos también restaurar en el conjunto de la península”, agregó.

La secretaria Bárcena Ibarra resaltó la visita que tuvieron con chicleros que producen chicle del zapote (manilkara zapote) y que tienen un manejo de la selva muy interesante en Quintana Ro, pues para ella, las comunidades son las que pueden ayudar en la restauración: 

“¿Para qué van a contratar los consorcios que están en el Tren Maya empresas que vienen, plantan un árbol y se les muere al día siguiente? Las propias comunidades pueden ser las que nos ayuden a restaurar el ecosistema forestal”.

Granjas porcícolas e inmobiliarias, la otra amenaza

En la Semarnat, no solo se están coordinando las acciones para la restauración ecológica de la Península de Yucatán por la construcción del Tren Maya, sino en el control de las granjas porcícolas, señaló la subsecretaria Mariana Robles García.

“El control y mejor manejo de la industria porcícola es también muy importante y también, el avance de los menonitas en varios de los sitios de la península”.

Al igual que con el reordenamiento de los desarrollos inmobiliarios, cuyas aguas residuales contaminan los cenotes:

“Es parte también de lo que Mariana (Boy) y el equipo de la Profepa han estado haciendo. Y esto nos lleva a lo que hemos identificado como dos de los grandes pasivos que se han acumulado y ha acrecentado con el desarrollo y el crecimiento poblacional de Yucatán, que son el problema del manejo de residuos y de las aguas residuales”, añadió.

Ambientalistas ven positivo el proyecto de recuperación ambiental


Organizaciones ambientalistas agrupadas en Sélvame del Tren vieron con beneplácito la propuesta de la Semarnat de resarcir los daños ocasionados por la construcción del Tren Maya como la creación de Reserva de la Biosfera para proteger a ríos subterráneos, cuevas, cavernas y cenotes.


Proponen que se frenen más construcciones alrededor del Tren Maya y advirtieron que seguirán denunciando y colaborando para evitar el ecocidio y mitigar la mayor cantidad del daño.

Garantizar soluciones efectivas y sostenibles, pide Greenpeace autoridades

La organización Greenpeace calificó como positivo el plan de remediación integral de la Semarnat para las zona afectadas por la construcción del Tren Maya en la Península de Yucatán y pidió a las autoridades involucrar a la ciudadanía, comunidades locales y especialistas para garantizar soluciones efectivas y sostenibles.

“El plan de protección de la Semarnat para el sistema de cenotes y cavernas en Quintana Roo debe contemplar un alto al uso intensivo de agrotóxicos en monocultivos industriales en Campeche, así como los desechos generados por las cientos de megagranjas porcícolas en Yucatán”, subrayó Greenpeace mediante un comunicado.

La eliminación de mallas en las vías del Tren Maya y la mejora de los pasos de fauna son un avance, resaltó la organización internacional, sin embargo, no han planteado las medidas que garanticen la reproducción y supervivencia de especies amenazadas, como el jaguar. Por ello, es necesario, agregó, trabajar en la instauración de corredores biológicos.

Resaltó que la expansión descontrolada de la industria modifica “irreversiblemente” el territorio, por lo que afecta no solo la calidad del agua, sino también la biodiversidad y los derechos de las comunidades locales.

Respecto a la reforestación en la zona, donde se cortaron más de 10 millones de árboles, Greenpeace cuestionó el tipo de árboles que se utilizarán, los procesos de plantación, la cantidad de árboles a sembrar.

Sedena busca aprobación de 26 nuevos proyectos en Quintana Roo

No obstante la devastación ecológica con la construcción del Tren Maya, de 28 proyectos de Quintana Roo inscritos en la Gaceta Ecológica para buscar la aprobación de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), 26 corresponden a la Sedena y al Tren Maya, informó la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a través de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (Dgira), el pasado 31 de marzo.

De los 26 proyectos que tiene la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), 19 de ellos es para solicitar la MIA con la finalidad de construir un banco de materiales pétreos: dos en Benito Juárez; tres en Playa del Carmen; 11 en Felipe Carrillo Puerto y uno en Bacalar, Othón P. Blanco y Tulum.

En cuanto a los proyectos de electrificación para el Tren Maya, la empresa “Fonatur Tren Maya, S.A. De C.V.”, la solicitud es para trabajar la estación eléctrica en Bacalar, Felipe Carrillo Puerto, Tulum y Benito Juárez (Cancún); es decir, en los tramos 7, 6, 5 y 4, respectivamente.

Los otros tres proyectos que desarrollará la Sedena en caso de ser aprobadas su MIA son: La construcción de un “banco de relleno sanitario” en Tulum; donde la inversión estimada se calcula en 15 millones de pesos, de los cuales estiman que se destinará aproximadamente un 10% de este monto a la implementación de las medidas de mitigación del proyecto, de acuerdo con el portal NotiCaribe.

Loading