Comuneros frenan el proyecto minero “Caballo Blanco”

El proyecto minero Caballo Blanco se ubica en los municipios de Alto Lucero y Actopan, en el estado de Veracruz. Este proyecto de minería a cielo abierto para la extracción de oro y plata ha enfrentado una fuerte oposición por parte de las comunidades locales y organizaciones ambientales debido a los graves impactos ambientales y riesgos para la salud que representa.
Por. J. Jesús Lemus
Comuneros y ejidatarios de Alto Lucero y Actopan, Veracruz, han dado ejemplo mundial de la lucha contra la minería a cielo abierto. Lograron frenar uno de los proyectos mas ambiciosos y mas letales de la minería mundial: el proyecto minero Caballo Blanco, para la extracción de oro y plata.
Los pobladores de las comunidades de La Paila, La Bandera, El Caballo Blanco, Palma Sola, Palmas de Arriba, Palmas de Abajo, Arroyo Agrio, La Mancha, Tierra adentro, Mesa de Veinticuatro y La Yerbabuena, lograron argumentar ante la autoridad judicial, lo pernicioso que resultaba el proyecto minero.
Se estableció, con evidencias tangibles, cómo el proyecto minero Cabello Blanco terminaría por arrasar el ecosistema de la zona norte de Veracruz, representando incluso un riesgo de desastre nuclear en la región, dado que las instalaciones de la planta nucleoeléctrica de Laguna Verde, de la CFE, podría verse afectada por movimientos telúricos.
La argumentación de cómo el proyecto minero Caballo Blanco, que fue autorizado por el gobierno del presidente Vicente Fox y respaldado por las administraciones de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, fue que la extracción de oro y plata en la zona terminaría convirtiendo un paraíso ecológico en un apocalíptico socavón de más de 36 mil hectáreas de extensión.
Al respecto del riesgo que representaba la mina de oro y plata Caballo Blanco, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) se posicionó al señalar que “las actividades mineras en esta región representan graves afectaciones que ponen en riesgo el proyecto de vida de las comunidades”.
Ese tipo de minería, explica el CEMDA, “representa una violación a su derecho colectivo (de las comunidades) de seguir siendo quienes son y quieren ser como comunidades y familias.
”La minería también es una amenaza al derecho al agua, ya que debido a la explotación de los recursos hídricos que requiere, deja a las comunidades en una situación de extrema vulnerabilidad ante la crisis hídrica y climática existente”.
Tales argumentos chocaron frente a los de las mineras propietarias de las 24 concesiones de explotación del suelo, otorgadas por el gobierno mexicano, las canadienses Goldgroup Mining, Candelaria Mining Corp., Minera Gavilán Goldgroup Resources, Minera Cardel y Agnico Eagle Mines, las que solo establecieron que -sin explicar métodos inocuos- pretendían extraeré más de 100 mil onzas de oro (2 toneladas 834 mil kilogramos) en un periodo de diez años.

Qué es el proyecto Caballo Blanco
El proyecto Caballo Blanco se ubica en los municipios de Actopan y Alto Lucero, a menos de tres kilómetros de la Central Nucleoeléctrica de Laguna Verde, y en él se pretende el aprovechamiento de un yacimiento de oro, para lo que se busca una mina a cielo abierto, de la cual Gold Group Mining Inc. pretende la extracción de 100 mil onzas de oro en un periodo de entre seis y diez años.
Para alcanzar dicho objetivo, la minera informó que sería necesario remover diariamente más de 30 mil toneladas de tierra y en ella diluir más de mil 500 toneladas de cianuro sódico al año, del que se tiraría más de tres mil metros cúbicos diarios de agua, que extraerán del rio Actopan.
Este proyecto fue una de las cartas fuertes de inversión anunciadas por el entonces gobernador Javier Duarte de Ochoa como respuesta a la generación de empleos y mejora a la economía de la zona centro del estado.
Por criticar las acciones de la minera y su sociedad con el gobierno de Veracruz, fue asesinado el periodista Milo Vela, el que criticó la visión del gobernador, a quien responsabilizó de promover la persecución que comenzaron a sufrir los vecinos de los municipios de Actopan y Alto Lucero que se opusieron a la operación de la minera.
Se decreta la suspensión definitiva
Por considerar que la operación de una gran mina a cielo abierto, para extraer oro y plata, afecta sustancialmente a mas de 120 mil habitantes de la zona rural de los municipios de Actopan y Alto Lucero, que se verían afectados por contaminación, escasez de agua y riesgo de intoxicación por elementos químicos, un juez federal asumió la justicia y decidió suspender el proyecto minero.
Un juez federal con sede en Xalapa, otorgó una suspensión definitiva contra todo el distrito minero de Actopan y Alto Lucero. Esta resolución judicial implica que no se puede ejecutar ninguna de las 24 concesiones mineras que la Secretaría de Economía había otorgado previamente en la zona. El juez determinó que el derecho a la salud y la protección de la vida prevalecen sobre el interés particular de la explotación minera.
Esta suspensión definitiva representa un importante triunfo para las comunidades y organizaciones que se han opuesto al proyecto Caballo Blanco, impidiendo que avance a la etapa de explotación. Las autoridades no podrán emitir autorizaciones y las empresas deben abstenerse de realizar cualquier actividad relacionada con el proyecto minero mientras el juicio de amparo siga su curso.
Que dice el amparo
Sustantivamente, el amparo da la razón a los vecinos de los municipios de Actopan y Alto Lucero, los que se quejaron por considerarse “vulnerados en (sus) derechos humanos a la vida digna, a un medio ambiente sano, al acceso al agua y a la participación en la toma de decisiones por la existencia de las concesiones mineras”.
Los amparos ganados por la comunidad de Caballo Blanco se basan en la violación de sus derechos humanos a un medio ambiente sano, al agua y a la participación en la toma de decisiones ambientales.
También se consideró que -como lo explica el CEMDA- “El distrito minero representa un riesgo inaceptable para la población adyacente por la cercanía con la Central Nucleoeléctrica Laguna Verde, el paso de líneas eléctricas de alta tensión, los ductos que transportan hidrocarburos y los eventos meteorológicos típicos de las zonas costeras.
”Esta industria extractiva tendría un impacto irreversible en la integridad de los socio ecosistemas costeros únicos dónde se encuentran plantas endémicas milenarias y una zona de tránsito de aves rapaces”.
Con esta suspensión se impide que el proyecto minero avance a la etapa de explotación. Las autoridades no podrán emitir autorizaciones y las empresas deben abstenerse de realizar cualquier actividad relacionada con el proyecto minero mientras el juicio de amparo siga su curso.
—oooOOOooo—