Julión Álvarez y Olga Sosa//Militares norteamericanos sobrevuelan frontera mexicana
Los elementos aéreos de la fuerza militar del país más belicoso y poderoso, desde luego que causó en los residentes fronterizos una mezcla agria de pánico, zozobra, indignación y temor, sentimientos que se acrecentaron el sábado con el anuncio del impuesto arancelario


Los rumores de sobrevuelos militares americanos en suelo mexicano, cada vez son más frecuentes y creíbles. El jueves pasado, personas de la zona de Reynosa y Río Bravo vieron un helicóptero de doble hélice, norteamericano y militar tipo Boing CH, bimotor. También vieron un avión grande de carga, perteneciente a aquel país.
Esto, luego del enfrentamiento registrado entre autoridades americanas con drones incursionando en tierras mexicanas y la fracción del Cártel del Golfo que opera en aquella zona, quienes finalmente acabaron con el equipo de espionaje americano.
Los elementos aéreos de la fuerza militar del país más belicoso y poderoso, desde luego que causó en los residentes fronterizos una mezcla agria de pánico, zozobra, indignación y temor, sentimientos que se acrecentaron el sábado con el anuncio del impuesto arancelario.
La ola de rumores respecto que el dólar subiría a 28 pesos (y otras cifras) y la cruda realidad de ver cómo Estados Unidos canceló las citas para visas de turista a los mexicanos, además de quitar las visas de turistas a las madres y padres de ciudadanos americanos, así como a las personas cuyas visas estén próximas a prescribir.
En medio de todo este ánimo internacional caldeado, el presidente Donald Trump y un par de secretarios de su staff, acusaron -en un hecho sin precedente- de forma directa y frontal a México de Narco Gobierno, es decir, le llamaron narco presidenta a Sheinbaum Pardo.
Ante semejante “infamias” Claudia Sheinbaum Pardo se vistió de blanco impoluto, se peinó tan estilizadamente que hasta moco de gorila gastaron en el chongo orzueloso que no se quita jamás, y salió empoderada, fiera y sin vergüenza alguna, a defenderse solita de las acusaciones de Trump por medio de un vídeo.
Debo reconocerle a la presidenta que debe tener una fuerza inmoral tremenda, para poder decir con toda la boca que ella no construye un Narcoestado ni permite narco políticos en su gobierno.
Mire, yo le pondré un solo ejemplo donde la presidenta se equivoca, y tal vez lo hace porque en realidad es ajena a este tipo de situaciones:
Usted sabe que hace poco tiempo los norteamericanos señalaron al artista JULIÓN ÁLVAREZ de socio del Crimen Organizado, le congelaron cuentas y hasta lo detuvieron para investigación.
Quiero decirle, que en Estados Unidos esa carpeta de investigación existe, así como la declaración archivada del señor Álvarez, en la cual le preguntan ¿Cómo conoció a su compadre y amigo Sergio Carmona Angulo el “Rey del Huachicol”, amistad que Julión -el macizo- niega, y al contrario, dice que con Sergio no había ni compadrazgo, ni amistad, ni amor, ni afecto, -vaya hasta gordo le caía- pero que le perdió el asco porque él, Sergio Carmona Angulo, pagó constante y sonante la cifra millonaria que el cantante cobra, en el cierre de campaña electoral de su “novia” OLGA SOSA RUÍZ.
Tal como usted lo lee; Julión Álvarez en una investigación por narcotráfico le dijo a las autoridades norteamericanas -según nos revela una fuente confiable del Consulado Americano- que Sergio Carmona Angulo el “Rey del Huachicol”, no era su amigo, ni su socio en actividades ilícitas, que no lo conocía ni le interesó sostener una amistad con el líder criminal, que su trato fue meramente comercial por su labor en el entretenimiento popular, y que a él “se lo presentó su novia”, cuando le preguntaron el nombre de la novia de Sergio Carmona, Julión Álvarez sin titubeo alguno respondió: OLGA SOSA RUÍZ, una política de Tamaulipas.
Sosa Ruiz Olga Patricia actualmente es Senadora, acogida, protegida, y literalmente abrazada por Adán Augusto López Hernández, el dueño y señor del Senado de la República, otro bandido con fuertes acusaciones de nexos con el narcotráfico.
A Olga se le ha señalado como operadora política de Sergio Carmona Angulo el traficante de huachicol financiador capitalista de varias campañas electorales morenistas, en las que figuran gobernadores y alcaldes, entre ellos el mismo Rubén Rocha Moya de Sinaloa, Eduardo Gattás de Ciudad Victoria, quien manejaba una camioneta propiedad del traficante, y claro la misma Olga Sosa Ruiz, para quien -según las declaraciones del artista popular- tocó en el cierre de una de sus campañas, la cual por cierto, perdió.
¡Lástima margarita, ni la quemada de rabo de la sonriente Olguita!!!
Así que señora presidenta con “A” de ¡Ay mamá los gringos! Las autoridades norteamericanas tienen en su poder los elementos necesarios para señalar la amplia relación y financiamiento de al menos, una “política” que trabaja en SU mesa del Senado y que ya hasta bardas anda pintando porque, dice ella, será la próxima gobernadora de Tamaulipas, una gobernadora con A y tendrá el poder de elegir una presidenta municipal con A también, haciendo alusión al madrinazgo que usted Claudia Sheinbaum les otorga.
De modo y manera que, en al menos un caso de delincuencia organizada, el señalamiento americano contra usted de narco presidenta, por proteger y recurrir al crimen para financiamientos electorales, Estados Unidos de América, puede y puede ampliamente, señalarla cómo constructora del Narcoestado mexicano, infiltrado en los 3 poderes de gobierno.
El caso de Olga Patricia Sosa Ruiz es un enorme botón de muestra, y no solo del pasado, si no del presente, porque a dónde va, ella abre su discurso hueco con “les traigo el saludo de Andrés Manuel y de nuestra presidenta Sheinbaum”.
¿De verdad lo seguirá permitiendo presidenta?
¿De verdad seguirá empoderando políticamente a una presunta ex amante de un líder criminal?
¿De verdad para usted es tan importante ese dicho populista “amor con amor se paga”, aunque Sosa Ruiz le represente el eslabón perdido, encontrado y usado como elemento acusatorio entre usted y Crimen Organizado?
Piénsalo presidenta porque cuando el gobierno de Donald Trump pida las cabezas de los actores políticos relacionados con los criminales terroristas, no se referirán a los que su venia seleccione, sino a aquellos que tienen expedientes de investigación por vínculos con el crimen organizado, como el caso de Olga Sosa, que hoy nos ocupa.
Nos leemos la próxima vez.