Ya son 16 cuerpos, hallados por Buscadoras de Jalisco en el panteón San Sebastianito de Tlaquepaque

Foto: Madres Buscadoras de Jalisco
Una lamentable, pero recurrente, noticia en nuestro país se dio a conocer el pasado sábado 16 de agosto, cuando el colectivo Madres Buscadoras de Jalisco informó el hallazgo de una fosa clandestina en el panteón de San Sebastianito, ubicado en Tlaquepaque.
Desde tempranas horas, el colectivo inició labores de búsqueda y dio con los primeros restos al caer la tarde. De inmediato se comunicaron con las autoridades; sin embargo, denunciaron que la actuación fue tardía, ineficiente y negligente.
En este contexto, las buscadoras señalaron que la Fiscalía del Estado de Jalisco tardó más de seis horas en llegar al sitio y, al hacerlo, no implementó los protocolos adecuados de preservación, procesamiento e investigación, lo que pone en riesgo la recuperación digna y científica de los restos humanos.
Por su parte, la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas no se presentó sino hasta 48 horas después del hallazgo. Fue hasta el lunes 18 de agosto, cuando a las Madres Buscadoras se les negó continuar con la búsqueda, que apareció la Fiscalía Especializada; no obstante, no realizaron comunicación alguna con el colectivo.

Para el 19 de agosto, el resguardo adecuado de la fosa encontrada no se había realizado: solo dos elementos de la policía estatal custodiaban el lugar y los restos estaban cubiertos únicamente con una lona, lejos de todo protocolo adecuado de protección.
A través de una transmisión en redes sociales, el colectivo señaló que la falta de atención del gobernador, Pablo Lemus, podría estar relacionada con la existencia de más restos enterrados en el panteón: “a ellos no les conviene que se sepa este hallazgo”, mencionaron.
“Aquí están las madres, estas madres que no se rinden, que todo el tiempo están buscando a sus seres queridos, haciendo el trabajo que la autoridad no hace. Y aquí vamos a seguir, día y noche, a ver si no le da vergüenza al gobierno que mejor las madres buscadoras estén aquí, sin comer, sin sueldo y sin agua, que ellos que sí reciben un sueldo.”
El 20 de agosto, poco después del mediodía, la Fiscalía del Estado de Jalisco lanzó un comunicado en el que aseguró que la Vicefiscalía en Investigación Especializada en Concertación Social inició una investigación por exhumaciones clandestinas en el panteón de San Sebastianito, acusando a “servidores públicos” de retirar restos mortales sin consentimiento con el objetivo de “revender espacios”.
Esta versión fue desmentida por el colectivo Madres Buscadoras de Jalisco, que aseguró que los restos hallados en el panteón presentan signos evidentes de violencia y que no se trata de exhumaciones. Señalaron que se trata de una estrategia para desviar la atención y minimizar la gravedad del hallazgo.
Según el testimonio anónimo que permitió este descubrimiento, en el panteón podrían localizarse más de 20 cuerpos en fosas clandestinas.
Ante el intento de desprestigiar el hallazgo, las buscadoras explicaron que el personal del panteón refirió que no cuentan con fosa común, por lo que no puede tratarse de cuerpos exhumados sin consentimiento. A ello se suma que el proceso de exhumación implica varios trámites y que, una vez concluido, los restos mortales son devueltos a su lugar original y recubiertos con cemento.
Ese mismo 20 de agosto, el colectivo confirmó que la zona donde se encontraron los primeros restos corresponde a entierros de menores de edad, mientras que los hallazgos se tratan de personas adultas cuyos cadáveres no llevan tanto tiempo en descomposición, pues aún presentaban fluidos.
El 22 de agosto, el colectivo emitió un comunicado en el que confirmó que los hallazgos del día 16 corresponden a 11 personas, cuyos restos muestran signos de violencia: estaban amordazados, amarrados, metidos en bolsas de basura y algunos con tiro de gracia, lo que constataron con fotografías adjuntas.

También comunicaron el hallazgo de dos cuerpos más el jueves 21 y de otro, dentro de un costal, el viernes, el cual presentaba huellas de tortura, violencia y estaba amordazado.
A una semana del hallazgo, el 23 de agosto, se registró un total de 14 cuerpos encontrados en el panteón de Tlaquepaque.
Ese mismo día ocurrió un acto de intimidación por parte de autoridades, quienes negaron el acceso al reportero Víctor Hugo Ornelas, a pesar de que no acudía en calidad de prensa, sino como voluntario en las labores de búsqueda, en las que ya había participado. El colectivo denunció el hecho mediante un comunicado.
El domingo 24 y el lunes 25 se localizaron dos cuerpos más, con lo que el total asciende a 16 hallazgos en el panteón de San Sebastianito.
Este martes, en el décimo día de labores, el colectivo informó que las búsquedas en el sitio continúan y afirmó: “seguiremos luchando y buscando, porque el amor por quienes nos faltan es más grande que cualquier obstáculo”.