Justicia Gráfica // Se renueva el gobierno de Américo Villarreal Anaya

Vienen cambios, caerán varios Directores Administrativos que se prestaron a contubernio con Adriana Lozano
La pura verdad
Por: Sofía Pacheco
Por fin se va Jorge Cuéllar Montoya de la Vocería de Seguridad en Tamaulipas, usted lo recordará como miembro honorífico de ese grupo de servidores públicos empeñados en destrozar la imagen del Gobernador Américo Villarreal Anaya, siempre permitiendo y hasta fomentando calumnias en contra del mandatario, incrementando dudas, acrecentando errores, mintiendo al pueblo con descaro, creando contradicciones tan descabelladas como cambiar 3 veces la respuesta oficial del gobierno ante la viral polémica del retiro de la visa de turista tanto del gobernador como de varios miembros de su familia.
Aunque faltan piezas del rompecabezas, sin duda alguna, Jorge Cuéllar Montoya es una pieza de este engranaje que ha llevado al abismo la imagen de un gobernador, hijo de un gobernador icónico y entrañable en la historia tamaulipeca, es decir, no era tan difícil construir proactivamente una imagen positiva y sólida alrededor de Américo Villarreal Anaya, pero por alguna extraña razón, Cuéllar Montoya y otros que también están en la cuerda floja hicieron trizas la cara pública del gobernador y con ella la de todo el estado.
La severa crisis en la figura del mandatario ni siquiera tiene que ver con sus prácticas políticas o conducta personal, hay que decirlo: Américo Villarreal ha dado apertura a todas las voces periodísticas, por ejemplo, abierto a nuestras críticas, consciente del informador libre que funge como puente entre su administración y la ciudadanía.
Américo es un gobernador que no intimida, que no amenaza, que no reprime ni reprende, si bien es algo parco, también hay que decir que ha sido hasta hoy sumamente respetuoso de la libertad periodística por muy dura que resulte, no así la gente cercana a él, verdaderos matones de la verdad, armados con páginas y cuentas cibernéticas dedicadas a destruir la imagen personal del periodista y/o como en el caso de una servidora, bajar una cuenta en Facebook con casi 100 mil seguidores, lo cual nos costó años de trabajo y sucumbió ante la intolerancia, sinrazón, abuso y la saña de contratar un hacker árabe que reclamó como propias todas mis columnas críticas hacia el gobierno.
Eso fue intimidante y agresivo pero sabemos que el gobernador Américo no dio semejante orden, ni mucho menos se enteró del atropello que sus chicos gandallas ejercieron en contra de mis derechos.
Américo Villarreal Anaya es un buen hombre a mi criterio y basándome no en un Facebook ni en un par de años de gobierno, sino en la información que tengo sobre toda su vida y trayectoria ciudadana, de verdad pienso que es un padre amoroso, un abuelo protector, un esposo dedicado a su esposa, presidente del patronato de padres de familia en la infancia y pre adultez de sus hijos, un hombre con un sentido muy agudo del valor y peso que tiene la familia.
Ese es el gobernador del estado, un buen hombre, no el cavernícola mafioso que nos pintan, pero y es un gran “pero”, tal vez su sentido de lealtad política lo equivocó al permitir que gente sucia y sin límites como Jesús Ramírez Cuevas, chilango y ex jefe de comunicación social de AMLO, interfiera en los asuntos exclusivos del estado.
La excesiva paciencia del doctor Américo Villarreal y otra vez su sentido de lealtad pero esta vez fraternal ha permitido que sus colegas como el Secretario de Salud Pública, Vicente Joel Hernández Navarro, situen la imagen de Tamaulipas, sus políticos y ciudadanos, como una especie de jungla prehistóricas donde se arrebatan la comida que cazaron o el botín que robaron como los 300 millones de pesos de la federación que 2 veces (en total más de 600 MDP) ha desaparecido del erario que la federación otorga al estado.
No es el caso único, en especial los doctores, su gremio, sus amigos, lo han usado para saquear donde pueden y, le pondré un ejemplo más, solo vea el Hospital Regional de Alta Especialidad en ciudad Victoria, ya medio muerto con la crisis federal en salud pública y encima cargando con nuevas administraciones que se dedican al desvío del poco recurso existente, el HRAE tiene varios meses sin servicio de ESTACIONAMIENTO, porque sin justificación alguna lo “rehabilitaron”, levantaron todo el concreto y le pusieron chapopote, no vaya a pensar usted que lo agrandaron por la ineficiencia del reducido espacio, !ni Dios lo mande!
Hace más de un mes terminaron la primera área y hace una semana la segunda, sin embargo, nomás no se usa ninguna porque sus directivos seguramente esperan la inaguración oficial con invitados especiales y mientras el paciente que se fastidie caminando largos tramos en silla de ruedas, andador, muletas, ¡no importa!
Otro amigo del doctor Américo Villarreal que no le hace justicia es el secretario de Desarrollo Rural, Pesca y Acuacultura, Antonio Varela Flores, quien le queda debiendo a la confianza depositada por el mandatario, con una agenda de trabajo floja, casi inexistente en lugar de hacer de su encomienda un pilar, un bastión para el gobernador.
Y de la esposa de Varela Flores, mejor ni hablamos porque es la que le ayuda al otro sinvergüenza Secretario de Salud, Vicente Joel Hernández Navarro, a sacar el dinero de la federación en aparatos para hospital fantasmas.
Así que bien por el gobernador Américo Villarreal Anaya si ya tomó la desición de empezar a sacudirse las rémoras, chinches y tepocatas de su administración, porque es eso lo que le punza, es gente que lo ha llevado a esta seria crisis de imagen pública y no tanto sus políticas de gobierno.
Empezó con la Tesorera Adriana Lozano hace un par de meses al separarla de su cargo y déjeme decirle que se vio generoso al solo correrla porque “la tesorito” presuntamente saqueó al estado de una manera burda como por ejemplo esas cuentas bancarias “de gobierno” que en realidad eran personales de ella, de modo que en lugar de hacer pagos a proveedores, etcétera, directamente la terrible tesorito al parecer desviaba el recurso a sus arcas.
Me aseguran que aún no terminan de contabilizar todas las transas de esta señora abusadora de la confianza que Américo Villarreal Anaya le confirió, saqueos que Lozano hizo apoyada por varios Directores Administrativos de dependencias muy importantes, con manejos presupuestales millonarios.
Me aseguran también que el gobernador ya dio firmemente la orden de hacer las cosas apegados a derecho caiga quien caiga, y lo creo porque la presencia del hoy Tesorero Jesús Lavin, quien es de los pocos servidores públicos honestos y leales a Villarreal Anaya así lo garantiza.
Otra cuestionable es Lucía Aimé Castillo Pastor, ex Secretaria de Educación, hoy sentada en el banquillo de los acusados en la Fiscalía Anticorrupción luego de haber convertido a la SET en una cueva de ladrones.
De modo que debemos entender la “renuncia” del Vocero Cuéllar Montoya como parte de una renovación al interior de la administración de Américo Villarreal, será intensa pero no sorpresiva, es un ejercicio que el mandatario debe hacer sin que signifique debilidad política, al contrario, será benéfico para Tamaulipas no solo en imagen, sin duda alguna, también en su práctica de gobierno.
Nos leemos la próxima vez